Reinventándome desde cero.

Me cuesta mucho trabajo cambiar de planes, pero en fin, la vida es corta para pensar en lo que dejamos de hacer. Aún así, los cambios intempestivos entre "lo que quiero hacer" y "lo que debo hacer", me han inclinado casi siempre, a la segunda. 

No es que no disfrute el camino, es que quizá trazo mis sueños en conversaciones imaginarias que tengo listas para el momento cuando realmente suceden. Pero ha habido sorpresas para las que no se puede estar listo, las preguntas de mi hijo, las sorpresas de la vida, lo inexplicable del amor. 

Acabo de decidir tomar la ruta que promete que, a través de "lo que debo", me llevará a "lo que quiero". Ojalá, te encuentre a mi lado tomando mi mano o esperándome al final. 

Mientras seguiré pensando/ en nuestro encuentro imaginario / te besaré, como nadie en este mundo te besó / te amaré, con el cuerpo, con la mente, con la piel y el corazón/ vuelve pronto te esperamos / mi soledad y yo.